Ayer hicimos la presentación del kamishibai Contáme un cuento Saki, una adaptación del cuento El cuentacuentos, de Saki, hecha por los chicos del Taller del Zorro. También presentamos el libro Historias celestes, los chicos leyeron algunas historias y recibieron muchos aplausos. ¡Una verdadera fiesta literaria!
28.11.13
25.11.13
21.11.13
Contáme un cuento, Saki
Ayer ensayamos la lectura del kamishibai y cómo pasar las láminas acompañando al texto rápido o despacio, según convenga.
La semana que viene vamos a dar una función para los padres, así que hicimos toda la puesta a punto de nuestra presentación. Son artistas con experiencia en desafíos porque no parecen nada nerviosos.
Aquí abajo unas fotos de la producción de las láminas.
16.11.13
Cartas
Hablamos de las novelas epistolares. Vimos el libro de Lemony Snicket, The Beatrice Letters y leímos algunas cartas escritas por Lewis Carroll.
Muchas de las chicas habían leído Querida Susy, querido Paul, de Christine Nöstlinger y les había gustado mucho. Hicimos sobres y decidieron a quién le escribirían una carta, a una vecina, a sus familias o a ellos mismos cuando fueran grandes.
7.11.13
Hacerse paisaje
Como era una lindísima tarde hicimos un picnic en el jardín y mientras comíamos cupcakes leímos El viaje de Lisa, de Paul Maar y algunos pasajes de Breve guía de lugares imaginarios, de Alberto Manguel y Gianni Guadalupe. Hablamos de las formas de ver un paisaje, de la contemplación profunda, de la mirada micro y macro y luego los chicos tomaron notas e hicieron su trabajo de campo.
31.10.13
Cuentos raros
Leímos un par de cuentos del libro de Leonora Carrington, Leche del Sueño, nos fascinamos y disfrutamos del mundo fantástico. Después llegó el momento de crear cuentos raros, rarísimos donde valía todo.
Escribimos en tarjetas distintos temas, escenarios, títulos, personajes, tramas, problemas, y soluciones. Mezclamos bien y … cuentos raros.
¡Que raras lágrimas!
Un día en mi casa mientras corría me clavé una astilla más grande que una tableta de madera de las que hay en el piso. Empecé a llorar como loco, pero estaba solo porque mis papás salieron (y me dejaron solo). De pronto me salieron unas lágrimas muy azules que empezaban a chillar: “que aburrido que es estar en un ojo todo el tiempo, comemos hormiga aplastada y de postre baba de gusano, queremos salirrrrr”. Yo les dije bueno, no pueden salir pero les puedo prometer algo, cada vez que llore voy a tener preparada sopa de pupila para que coman. Julia M.A.
En el zoo de Atlanta la señorita Violeta de pelo color cinta y cinco aritos paseaba de la pata a su bocadillo de durazno. Juana B.
24.10.13
En el cielo, los poetas
Leímos Ascensor para las estrellas de Gianni Rodari y bajamos en el piso de la poesía. Jugamos con palabras celestes y surgieron poemas, cuentos y haikus. ¡El libro de los exploradores espaciales está por despegar!